Basado en Apocalipsis 21 y 22
UNA NUEVA TIERRA -
Apocalipsis 21:1-2 Nueva Traducción Viviente
21 Entonces vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra habían desaparecido y también el mar. 2 Y vi la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo desde la presencia de Dios, como una novia hermosamente vestida para su esposo.
Apocalipsis 21:5 Reina-Valera 1960
5 Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.
ESTA PROMESA YA HABÍA SIDO HECHA A TRAVÉS DE LAS ESCRITURAS.
2 Pedro 3:7-13 Nueva Traducción Viviente
7 Por esa misma palabra, los cielos y la tierra que ahora existen han sido reservados para el fuego. Están guardados para el día del juicio, cuando será destruida la gente que vive sin Dios. 8 Sin embargo, queridos amigos, hay algo que no deben olvidar: para el Señor, un día es como mil años y mil años son como un día. 9 En realidad, no es que el Señor sea lento para cumplir su promesa, como algunos piensan. Al contrario, es paciente por amor a ustedes. No quiere que nadie sea destruido; quiere que todos se arrepientan. 10 Pero el día del Señor llegará tan inesperadamente como un ladrón. Entonces los cielos desaparecerán con un terrible estruendo, y los mismos elementos se consumirán en el fuego, y la tierra con todo lo que hay en ella quedará sometida a juicio. 11 Dado que todo lo que nos rodea será destruido de esta manera, ¡cómo no llevar una vida santa y vivir en obediencia a Dios, 12 esperar con ansias el día de Dios y apresurar que este llegue! En aquel día, él prenderá fuego a los cielos, y los elementos se derretirán en las llamas. 13 Pero nosotros esperamos con entusiasmo los cielos nuevos y la tierra nueva que él prometió, un mundo lleno de la justicia de Dios.
LA TIERRA COMO LA CONOCEMOS NO PERMANECERÁ PARA SIEMPRE…LUEGO DEL JUICIO DE DIOS, SU PUEBLO VIVIRÁ EN UNA TIERRA NUEVA.
En realidad, podemos decir que la tierra ya sufrió su primera transformación después de su destrucción mediante el diluvio. Entonces, estamos viviendo un segundo orden en la creación. Podemos observar cambios entre un orden y otro. Por ejemplo, los humanos antes del diluvio vivían hasta 900 años versus el ser humano actual que vive, si acaso hasta los 100 años y un poquito más. Algunos aseguran que para entonces los días se contaban de forma distinta, y aunque esto fuera así…son muchos más los años adicionales que vivían los mencionados en la biblia. Pedro nos habla de un tercer orden en la creación. Esta vez la destrucción no será con agua, como en el diluvio, sino mediante el fuego. Recordemos que ya Dios, lo había anticipado cuando estableció el arcoíris en señal de que nunca volvería a destruir el mundo por agua (Génesis 9:11-16).
En esta porción Pedro también nos insta a arrepentirnos, convertirnos y vivir para El Señor en espera de Su regreso y del final de los tiempos. DIOS ES PACIENTE, pero llegará el día en que regrese como Juez y no como Salvador.
¿CÓMO SERÁ ESTA NUEVA TIERRA? –
Lo primero que tenemos que entender es que esta tierra será totalmente distinta a todo lo que conocemos.
Apocalipsis 21:5-6 Reina-Valera 1960
5 Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas. 6 Y me dijo: Hecho está. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al que tuviere sed, yo le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida.
Los capítulos 21 y 22 tratan de describir cómo será la ciudad santa donde viviremos eternamente. Menciona piedras preciosas y nos da una idea de lo maravilloso que será este lugar. Claro está, Juan no podía describir algo que nunca había visto. Así que lo poco que sabemos es que ni lo más bello y valioso de este mundo se compara con esta nueva tierra. ¡WOW! Qué locura que las naciones se peleen por el oro, y con algo más valioso que esto se pavimentan las calles de la ciudad santa (Apocalipsis 21:21)
Una de las cosas que más me fascinan de nuestro Dios es lo claro que nos habla. El mensaje de que esta tierra es meramente transitoria y dará paso a una tierra permanente, no es nada nuevo. De hecho, se nos ha venido diciendo desde hace cientos de años.
Salmos 102:25-28 Reina-Valera 1960
25 Desde el principio tú fundaste la tierra, los cielos son obra de tus manos. 26 Ellos perecerán, mas tú permanecerás; Y todos ellos como una vestidura se envejecerán; Como un vestido los mudarás, y serán mudados; 27 Pero tú eres el mismo, Y tus años no se acabarán. 28 Los hijos de tus siervos habitarán seguros, Y su descendencia será establecida delante de ti.
Isaías 66:22 Reina-Valera 1960
22 Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra que yo hago permanecerán delante de mí, dice Jehová, así permanecerá vuestra descendencia y vuestro nombre.
¿CUÁLES SON LAS GRANDES DIFERENCIAS ENTRE ESTA TIERRA Y LA NUEVA?
Lo más espectacular es que vamos a poder estar ante la Presencia de Dios. Ya no en espíritu como hasta ahora, sino que Él estará ENTRE NOSOTROS…
Apocalipsis 21:3 Reina-Valera 1960
3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios.
¡OH MY GOD! ¿Tú sabes cuántas veces he anhelado ver al Señor; Sentirlo y recibir un abrazo de Él? Pues cuando estemos en la nueva tierra eso mismo va a pasar.
PERO NO SOLAMENTE ESTARÁ CON NOSOTROS, podremos verlo como dice la preciosa canción de Marcos Vidal…” Cara a Cara”.
Apocalipsis 22:4 Reina-Valera 1960
4 y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes.
Somos Su propiedad y así mismo igual que ahora mantenemos Su Nombre en nuestro corazón, en la nueva tierra estaremos verdaderamente sellados por Él.
ASÍ MISMO NOS LO HABÍA DICHO JESÚS:
Mateo 5:8 Reina-Valera 1960
8 Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
El vivir en Su Presencia, ver Su rostro y ser proclamados Su propiedad sería suficiente para hacer de esta nueva tierra algo deseado...
PUES DEJAME DECIRTE LO QUE NO HABRÁ:
NO HABRÁ LÁGRIMAS, NI MUERTE, NI DOLOR -
Apocalipsis 21:4 Reina-Valera 1960
4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.
No habrá depresión, no habrá separación de los que mueren y dejan familia atrás.
TAMPOCO HABRÁ TEMPLO –
Apocalipsis 21:22 Reina-Valera 1960
22 Y no vi en ella templo; porque el Señor Dios Todopoderoso es el templo de ella, y el Cordero.
¡FUERA OSCURIDAD! –
Apocalipsis 21:23 Reina-Valera 1960
23 La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que brillen en ella; porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera.
Apocalipsis 22:5 Reina-Valera 1960
5 No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos.
¡FUERA ENFERMEDAD! -
Apocalipsis 22:1-3 Reina-Valera 1960
22 Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero. 2 En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones. 3 Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán,
¿QUIÉNES NO VAN A PODER ENTRAR?
Apocalipsis 21:8 Reina-Valera 1960
8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.
Los cobardes son aquellos que tienen miedo de confesar a Cristo como Su Salvador por temor a perder sus vidas o propiedades. Los que se niegan a aceptar a nuestro Redentor, aun estando convencidos de Su Verdad. Los incrédulos son aquellos que no están dispuestos a creer y confiar en Jesús como Salvador, los que se resisten a aceptar la evidencia concluyente del Evangelio. Son aquellos que deciden permanecer en pecado, haciendo o no toda clase de iniquidades. No tienen que hacer cosas dramáticas, porque lo que les condena no es lo que hacen, sino su decisión de permanecer fuera de la voluntad del Padre.
Apocalipsis 21:27 Reina-Valera 1960
27 No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero.
Apocalipsis 22:15 Reina-Valera 1960
15 Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras, y todo aquel que ama y hace mentira.
De acuerdo a los orientales, el perro era el símbolo de todo lo salvaje y sucio. Por eso los judíos llamaban perros a los gentiles. Otras versiones sugieren que los perros no son solamente los desvergonzados y los incrédulos, sino también los cristianos que vuelven al vómito después del bautismo. Así que perro puede ser un símbolo de todo lo repugnante. Hay otra posibilidad, basado en Deuteronomio 23:18, que sugiere puede referirse a la prostitución de varones. El perro entonces puede representar a cualquier persona que sea inmoral.
¿QUIÉNES SERÁN LOS MORADORES DE LA GRAN CIUDAD?
Apocalipsis 21:7 Reina-Valera 1960
7 El que venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo.
¿Y QUIÉN ES EL QUE VENCE?
1 Juan 5:4-5 Reina-Valera 1960
4 Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. 5 ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?
Apocalipsis 21:27 Reina-Valera 1960
27 No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, SINO SOLAMENTE LOS QUE ESTÁN INSCRITOS EN EL LIBRO DE LA VIDA DEL CORDERO.
Apocalipsis 22:14 Nueva Traducción Viviente
14 Benditos son los que lavan sus ropas. A ellos se les permitirá entrar por las puertas de la ciudad y comer del fruto del árbol de la vida.
SON AQUELLOS QUE HAN RECIBIDO EL PERDÓN DE SUS PECADOS PORQUE HAN SIDO LAVADOS EN LA SANGRE DEL CORDERO DE DIOS. SUS NOMBRES ESTÁN REGISTRADOS EN EL LIBRO DE LA VIDA.
¿CUÁN PRONTO OCURRIRÁN ESTAS COSAS?
Apocalipsis 22:7 Reina-Valera 1960
7 !!He aquí, vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro.
Apocalipsis 22:10-13 Reina-Valera 1960
10 Y me dijo: No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca. 11 El que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía; y el que es justo, practique la justicia todavía; y el que es santo, santifíquese todavía.
12 He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra. 13 Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último.
Apocalipsis 22:20 Reina-Valera 1960
20 El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús.
Ciertamente el día específico y la hora no la sabemos. Pero esto no debería preocuparnos si es que ya hemos aceptado a Jesús como nuestro Salvador. Si aceptamos Su Señorío y Autoridad sobre nuestra vida y si constantemente buscamos Su Voluntad viviremos con la expectativa de su retorno. Con la anticipación de vivir con Él eternamente.
ENTONCES, El Libro del Apocalipsis no debe asustarnos, por el contrario, debe ser un recordatorio de que Jesús viene por ti y por mi para integrarnos a los que ya viven eternamente ante la Presencia del Único y Maravilloso Redentor.
DETALLES INTERESANTES DE LA CIUDAD GLORIOSA -
La Nueva Jerusalén se describe en el Capítulo 21:9-21.
Con una vara de medir de oro, el ángel determinó que la ciudad medía doce mil estadios de longitud, altura y anchura. Era bastante común que las ciudades se edificaran en forma de cuadrado. Tanto Babilonia, como Nínive fueron construidas de esta forma. Pero la Santa Ciudad es perfectamente “cúbica”. Su longitud, anchura y altura son iguales. El cubo es el símbolo de la perfección. Tanto Platón, como Aristóteles se refieren al hecho de que en Grecia se decía que el hombre era “cúbico”. Lo mismo se decía entre los judíos. El altar de los holocaustos, el del incienso y el pectoral del sumo sacerdote tenían la forma de un cubo. Aún el templo de Salomón, el Lugar Santísimo era un cubo perfecto (1 Reyes 6:20). EL SIMBOLISMO QUE PROVEE JUAN TRATA DE HACERNOS COMPRENDER QUE TODA LA CIUDAD, ES EL LUGAR SANTÍSIMO, O SEA, LA MORADA DE DIOS. Tenemos que fijarnos en las dimensiones de la ciudad; cada lado tiene 12,000 estadios. Un estadio equivale a 180 metros, por tanto, cada lado tiene 2,160 kilómetros. El área de la ciudad es de 4,665,600 kilómetros cuadrados y el volumen total de la ciudad es de 279,936,000 kilómetros. Para que tengamos una idea del tamaño de esta ciudad, esta llegaría desde Londres a Nueva York, y tendría la extensión aproximada del Océano Atlántico. ¡WOW! Para los que creen que no hay espacio para los cientos y cientos de santos que ya tienen preparadas sus moradas, como el mismo Jesús prometió antes de partir de este mundo (Juan 14:1-3).
Yo ciertamente he pedido que la mía esté frente al Mar de Cristal. ¿Y TÚ…DÓNDE PIENSAS PASAR LA ETERNIDAD?
REFERENCIAS
Comentario Bíblico de William MacDonald, Editorial Clie, 2004
Comentario al Nuevo Testamento de William Baclay, Editorial Clie, 2006
Comentario de la Santa Biblia de Adam Clarke, Casa Nazarena de Publicaciones, 1974
Biblia de Estudio MacArthur, Grupo Nelson, 2015