La Epístola a los Colosenses solo cuenta con cuatro capítulos. Cuando comenzamos a estudiar esta carta escrita por Pablo desde la cárcel en Roma y leemos los primeros ocho versículos nos maravillamos de la aparente condición espiritual de la iglesia. Pablo resalta todo lo positivo de esta congregación:
Colosenses 1:3-8 Reina-Valera 1960
3 Siempre orando por vosotros, damos gracias a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, 4 habiendo oído de vuestra fe en Cristo Jesús, y del amor que tenéis a todos los santos, 5 a causa de la esperanza que os está guardada en los cielos, de la cual ya habéis oído por la palabra verdadera del evangelio, 6 que ha llegado hasta vosotros, así como a todo el mundo, y lleva fruto y crece también en vosotros, desde el día que oísteis y conocisteis la gracia de Dios en verdad, 7 como lo habéis aprendido de Epafras, nuestro consiervo amado, que es un fiel ministro de Cristo para vosotros, 8 quien también nos ha declarado vuestro amor en el Espíritu.
Primeramente, los creyentes en la ciudad de Colosas, una ciudad de la región de Frigia situada cerca de la frontera con Asia, tenían FE EN CRISTO JESUS (vs.3). O sea, tenían la seguridad de que Él es el Hijo de Dios. El Mesías Prometido, a través de quien sus pecados eran perdonados y ellos reconciliados con Dios.
En segundo lugar, Pablo reconoce el amor que se tenían los unos a los otros y a todos los santos (vs.3). Esto se traduce en simpatía por los miembros de la familia de la Fe. Se afectaban si uno de ellos se enfermaba, o tenían alguna dificultad. Se preocupaban por suplir necesidades cuando era necesario. Se gozaban con los éxitos de sus hermanos, etc.
Eran oidores de la Palabra Verdadera del Evangelio (vs. 5) que estaba creciendo en sus corazones llevando fruto como habían aprendido a través de Epafras, un consiervo de Pablo.
PERO EN EL VERSÍCULO 9 PABLO LES SEÑALA LO QUE TODAVÍA LES FALTABA.
Colosenses 1:9 Nueva Traducción Viviente
9 Así que, desde que supimos de ustedes, no dejamos de tenerlos presentes en nuestras oraciones. Le pedimos a Dios que les dé pleno conocimiento de su voluntad y que les conceda sabiduría y comprensión espiritual.
A través de su oración descubrimos que:
TODAVÍA NO HABÍAN SIDO LLENOS DEL CONOCIMIENTO DE SU VOLUNTAD, EN SABIDURÍA E INTELIGENCIA ESPIRITUAL.
Mucho se habla de la madurez emocional, pero ¿cuántos de nosotros oramos para que El Señor nos de sabiduría e inteligencia espiritual? OH MY GOD!.. Y mira lo que nos dice el apóstol, no podemos llegar a SU VOLUNTAD, si primero no somos llenos de sabiduría e inteligencia espiritual. PERO… ¿Y DE QUÉ ESTARÁ HABLANDO PABLO?
Nos recuerda Salmos 111:10, lo que todos hemos escuchado alguna vez: QUE “El principio de la sabiduría es el temor de Jehová”. Es decir que el “sabio”, no es necesariamente el que lo sabe todo, sino el que sabe y reconoce QUIÉN ES EL TODO, AL QUE LO SABE TODO, PORQUE LO CREÓ TODO. Ciertamente, en nuestra humanidad NO PODEMOS ENTENDER NI PERCIBIR A DIOS.
Un querido maestro de religión, cuando estudiaba en el colegio católico del cual me gradué, un día nos dijo probablemente lo más razonable de todo el curso, “no podemos entender a Dios porque sería como meter todo el mar en un vaso de cristal”. ¡UFF! ¡Se la comió! (como diríamos en Puerto Rico). ENTONCES, si no podemos percibir, conocer o entender a Dios, ¿cómo nos dice Pablo que conoceremos Su voluntad para nuestra vida?
MIRA LO QUE NOS DICE 1 CORINTIOS:
1 Corintios 2:13 Reina-Valera 1960
13 lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual.
1 Corintios 2:13 Traducción en lenguaje actual
13 Cuando hablamos de lo que Dios ha hecho por nosotros, no usamos las palabras que nos dicta la inteligencia humana, sino que usamos el lenguaje espiritual que nos enseña el Espíritu de Dios.
La sabiduría que debemos pedir y anhelar es la que es revelada por nuestra relación con El Señor a través del Espíritu Santo. Si no poseemos esta sabiduría, nunca descubriremos el PERFECTO PLAN PARA NUESTRA VIDA.
Esta iglesia en Corinto era tremenda. Tenían fe en Cristo Jesús, se amaban y se apoyaban; finalmente escuchaban la Palabra del Señor. PERO ESTO NO ERA SUFICIENTE PORQUE NO HABÍAN SIDO LLENOS DE LA SABIDURÍA ESPIRITUAL QUE LES PERMITIRÍA ENTENDER LA VOLUNTAD DE DIOS PARA SUS VIDAS Y PARA LA MISMA IGLESIA.
La Escritura habla de forma incesante acerca de hacer la Voluntad de Dios. Es decir, que para agradar a nuestro Dios ciertamente tenemos que estar dentro de Su voluntad. De hecho, hasta Jesús nos exhorta a hacer Su voluntad:
Juan 15:14 Reina-Valera 1960
14 Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.
No nos equivoquemos… Jesús es nuestro amigo si nos sometemos a Él. El jamás olvida que es DIOS. Cuando trabajaba en el Tribunal Federal Distrito de Puerto Rico había esta Magistrado bien simpático. Cuando quería hacernos reír era maravilloso, pero nunca cruzábamos la línea del respeto a la autoridad, porque él nos recordaba que con risas o sin ellas, él seguía siendo el juez. JESÚS ES NUESTRO AMIGO FIEL, eso lo aprendemos y lo cantamos, pero antes de amigo es SALVADOR, REDENTOR Y DIOS ETERNO.
ENTONCES…se hace aún más importante, el hacer Su Voluntad.
Anhelar y orar para ser investidos con la sabiduría espiritual es sin duda hacer del próximo versículo una de nuestras metas:
Proverbios 3:5-7 Nueva Traducción Viviente
5 Confía en el Señor con todo tu corazón; no dependas de tu propio entendimiento. 6 Busca su voluntad en todo lo que hagas, y él te mostrará cuál camino tomar. 7 No te dejes impresionar por tu propia sabiduría. En cambio, teme al Señor y aléjate del mal.
¿Y CÓMO SE EXHIBE ESTO EN NUESTRA VIDA DIARIA?
El callar cuando hay que callar y hablar cuando debemos hablar. No porque nosotros decidamos en nuestra extremadamente limitada sabiduría humana lo que corresponde, sino porque mantenemos una relación tan estrecha con el Espíritu Santo, que Él nos dirige a cada instante.
Medir nuestras palabras sabiendo que pueden ser un puñal en la vida de mi hermano.
Ser compasivos con los que nos ofenden reconociendo que la mitad de las veces que somos heridos el prójimo no hace sino proteger sus propias heridas.
Recordar que todos anhelamos lo mismo; ser respetados y apreciados.
· Entender que todos le tememos a los mismo; fracasar y ser avergonzados.
La sabiduría que viene de lo alto nos permite tener la vista con los espejuelos de una dimensión distinta, no humana, no terrenal. Esos espejuelos que nos dan la capacidad de ver lo que no se ve… Tener una constante visión de lo eterno y la clara percepción de que nuestra participación en los planes del Señor es importante dentro del marco de un Dios que quiere alcanzar al mundo que todavía no le conoce. Ese mundo que resulta ser el nuestro.
La sabiduría que es impartida por El Espíritu Santo nos hace andar como es digno de nuestro Dios. Con respeto a nosotros mismos y a nuestro cuerpo. No cultivando hábitos que nos separan o nos pueden separar de nuestra relación con Dios (bebida, drogas, apuestas, visitar lugares inapropiados, etc.)
Siendo honestos, apegándonos a la verdad y tomando responsabilidad por nuestras acciones; asumiendo las consecuencias de las mismas, aunque impliquen severas penalidades.
Así que el Apóstol ruega al Señor que esta iglesia amada, que tenía tantas características positivas, no se conformara con lo que ya había obtenido. Que comprendieran que el crecimiento no termina, sino hasta que nos presentemos ante Su Presencia. Hasta entonces tenemos que pedirle dirección al Espíritu Santo para entender la VOLUNTAD DEL PADRE para nuestra vida.
Algo que aprendemos en el camino, es la importancia de AGRADARLE A DIOS. Yo siempre hablo de hacerle sonreír. Y es que la Biblia nos habla de este concepto en repetidas ocasiones.
Colosenses 1:10 Nueva Traducción Viviente
10 Entonces la forma en que vivan siempre honrará y agradará al Señor, y sus vidas producirán toda clase de buenos frutos. Mientras tanto, irán creciendo a medida que aprendan a conocer a Dios más y más.
La voluntad del Señor es que una vez seamos salvos, crezcamos en nuestra relación con Él y seamos capacitados para el servicio, dando BUENOS FRUTOS, al ciento por uno (Lucas 8:1-15),
1 Tesalonicenses 2:4 Nueva Traducción Viviente
4 Pues hablamos como mensajeros aprobados por Dios, a quienes se les confió la Buena Noticia. Nuestro propósito es agradar a Dios, no a las personas. Solamente él examina las intenciones de nuestro corazón.
Dios se agrada cuando decidimos compartir las Buenas Nuevas de Salvación con la sola motivación de que éstas sean utilizada por el Espíritu Santo para convencer de pecado y de su necesidad de redención a los que no le conocen . Una vida gana para Cristo no puede ser una medallita para el instrumento.
EL CRÉDITO, HONRA Y GLORIA SÓLO ES PARA NUESTRO SEÑOR.
Hebreos 11:6 Nueva Traducción Viviente
6 De hecho, sin fe es imposible agradar a Dios. Todo el que desee acercarse a Dios debe creer que él existe y que él recompensa a los que lo buscan con sinceridad.
Nada es posible sin el Poder de Dios. Podemos tener la mejor intensión de servirle porque estamos convencidos de que el modelo de vida de Jesús es saludable y honesto. Podemos entender que sus principios morales son deseables para nuestra familia y la sociedad en general; PERO, si no tenemos fe, seguridad y certeza en Su Divinidad, entonces seria lo mismo enseñarles a nuestros hijos los buenos modales de los libros de etiqueta.
Efesios 6:6 Reina-Valera 1960
6 no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios;
Agradamos a Dios cuando a pesar de ser rechazados por los que nos rodean, hemos creído que, como servidores y esclavos del Señor, Él nos sostiene y dirige; más que nada nos da el discernimiento para tomar el camino que realmente es aceptado, agradado y ordenado por Dios.
ENTONCES, ¿QUÉ LE FALTABA A LA IGLESIA DE CORINTO QUE POSIBLEMENTE NOS FALTE A NOSOTROS TAMBIÉN?
Después de haber examinado el tema tenemos que concluir que El Señor espera, ordena y merece mucho más de lo que estamos listos a dar. Ser parte de la Familia de la Fe, es más que tenernos afectos los unos por los otros. Es más que venir a escuchar los estudios de la Palabra cada vez que haya la oportunidad y es más que creer en Cristo Jesús. Sin duda, sin estas características ni siquiera seríamos iglesia.
El Señor espera que respiremos anhelando hacer Su Voluntad. Que nos acerquemos a Él más que solamente una máquina de milagros; que nos acerquemos a Él sin planes de separarnos jamás. Que querramos escucharle en el silencio y permitamos Su Manifestación en lo que nos rodea. Que nuestro plan diario incluya hacerlo sonreír. Agradarle debe ser nuestra meta, pues jamás le conoceremos para hacer Su Voluntad si no nos proponemos acercarnos íntimamente hasta ver el mundo con Sus propios anteojos. Que entendamos que, como me dijo mi maravilloso maestro, Dr. Samuel Solivan, aprendamos y disfrutemos de nuestras diferencias como las pequeñas piedrecitas que se encuentran juntas en la orilla del mar. Todas juntas, complementándose aprenden a embellecer el mundo que El Señor nos regaló. Hay mucho por alcanzar en nuestras vidas individuales, como en nuestras iglesias para poder agradar a Dios. No nos acomodemos a este mundo, pues el próximo ya está preparado para nuestra ida.
REFERENCIAS:
Diccionario Teológico Beacon, Richard S. Taylor et al; Casa Nazarena de Publicaciones, 1995
Comments